Hay cosas que de tan pastelón, pueden provocarte la necesidad de un chute de insulina de emergencia.
Esta peli es una de ellas.
Basada en un libro de Nicholas Sparks, el azúcar rezuma por todas partes.
Todo son miraditas, musiquita bucólica y paisaje de ensueño.
Que me parece superbien. Que hay público para todo, y en muchas ocasiones yo he sido de esa clase de público.
Pero no hoy.
Serán las cinco horas que he dormido (he estado leyendo hasta altas horas de la madrugada), o que Zac Efron no me pone (porque si vas a ver una peli de esas, el prota tiene que hacerte tilín sí o sí, sino ¿para qué vas?), o que a mitad de peli ya estaba pensando en otras cosas.
Puntuación: 4
2 comentarios:
Gracias por avisar, no sabes lo que se agradecen estas cosas..,:-))
Saludos
Roy
Roy Bean:
Es que yo me sacrifico por los demás... ja,ja, soy como la Madre Teresa de las pelis ñoñas.!!
:P
Un saludo.
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