Leon Bronstein (Jay Baruchel, Aprendiz de brujo, She's out of my league) se preocupa por la calidad de vida de los trabajadores, y los discursos políticos no paran de salir de su boca. Lo curioso es que Leon va al instituto, y se cree la reencarnación de Leon Trotsky el revolucionario bolchevique. Con su vida escrita de antemano, busca a una mujer Alexandra, que será 9 años mayor que él, y su futura esposa, a su Lenin, que dará la orden de asesinarlo (con un pica hielos), sabe que será encarcelado, y mandado al exilio.
Mientras, frente a los rígidas maneras del director de su instituto, decide formar un sindicato de estudiantes. Aunque se encontrará con algunos obstáculos, la burla del director y su ayudante, el desentendimiento del consejo de profesores, y la apatía y aburrimiento de los mismos estudiantes.
Curiosa comedia estudiantil canadiense, con mas cerebro de lo habitual, eso si, pero visitando todos los lugares comunes a los que estamos acostumbrados en este tipo de películas. Si uno se sabe la vida de Trotsky (mas o menos) debe ser mucho mas graciosa, por cierto, su verdadero apellido era Bronstein, como el de nuestro prota.
Puntuación: 5'5
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